La endometriosis es una enfermedad
caracterizada por la presencia fuera de la cavidad del útero de tejido idéntico
al endometrio. Las lesiones pueden producir adherencias, a veces muy
importantes a nivel de la cavidad abdominal, sobre todo la vejiga, asas
intestinales o recto.
Las principal teoría que intenta
explicar porqué se producen implantes de tejido endometrial fuera de su
localización habitual habla de la menstruación retrógrada; es decir el reflujo
menstrual desde el útero hacia las trompas en lugar de ir hacia el cuello del
útero y la vagina.
Se estima que la endometriosis afecta
entre el 3 y el 10 % de las mujeres en edad
fértil y entre el 25 y el 35 % de las mujeres con problemas de esterilidad.
Es una enfermedad con manifestaciones
clínicas muy variadas. Las más típicas son dolor abdominal y esterilidad. El
dolor puede coincidir con la regla o al tener relaciones sexuales o mantenerse
constante.
La presentación de esta enfermedad
puede variar desde pequeñas lesiones en órganos pélvicos hasta grandes quistes
ováricos que es la localización más frecuente. Estos quistes denominados
endometriomas pueden afectar a un ovario o a ambos y su tamaño asimismo también
puede variar mucho de unas pacientes a otras. Estos quistes tienen un aspecto
típico negruzco y por eso se conocen como “quistes de chocolate”. Las
adherencias son otro de los hallazgos característicos de la endometriosis y
suponen la unión de distintos órganos o estructuras pélvicas mediante tejido
fibroso y pueden causar dolor o incluso obstrucción de algún órgano como asas
intestinales.
El tratamiento es muy variado y
depende sobre todo de la edad, del deseo
de gestación, de la gravedad de los síntomas o de la respuesta a tratamientos
anteriores. El tratamiento debe ser individualizado en todos los casos.
Normalmente los endometriomas grandes (mayores de 4 cm) en una paciente con
deseo de embarazo suelen ser quirúrgicos. La técnica suele ser realizar una
quistectomía por laparoscopia, es decir resecar el quiste, dejando la mayor
parte de ovario sano por cirugía mínimamente invasiva como la laparoscopia.
Otros tratamientos pasan por el uso de analgésicos o antiinflamatorios para el
dolor pero estos tratamientos no curan ni frenan la endometriosis. Uno de los
tratamientos más usados son los tratamientos hormonales para intentar disminuir
la secreción de hormonas y así disminuir la sintomatología y en
determinadas ocasiones el tamaño de los
endometriomas. Los más típicos son los anticonceptivos orales que se usan sobre
todo en mujeres jóvenes con poca sintomatología y sin deseos de gestación.
Otros artículos relacionados con la clínica ginecológica.
Para un buen seguimiento y cuidar la salud de la mujer la Clínica Tambre pone a su disposición una revisión ginecológica completa con tan solo una visita.
Para más información visite nuestra WEB
No hay comentarios:
Publicar un comentario